Durante el fin de semana pasado, Petróleos Mexicanos (Pemex), en coordinación con autoridades federales, intensificó su estrategia para combatir el huachicol, llevando a cabo operativos simultáneos en 15 estados. Estas acciones respondieron a la creciente detección de tomas clandestinas y a reportes por disminución de presión en los ductos, un indicio común de extracción ilícita de combustible.
Entre el 30 de mayo y el 2 de junio, se realizaron inspecciones en entidades con alta incidencia de robo de hidrocarburos, incluyendo Hidalgo, Jalisco, Puebla, Tabasco, Nuevo León, Chihuahua, Coahuila, Guanajuato, Estado de México y Baja California. En total, fueron identificadas alrededor de 100 tomas clandestinas, siendo Tabasco uno de los estados con mayores decomisos.
El operativo se sustentó en el uso de tecnología de monitoreo avanzada, además de denuncias ciudadanas anónimas que alertaron sobre actividades sospechosas en diversas regiones. Como resultado, se localizaron y desactivaron múltiples tomas ilegales, además de incautar grandes volúmenes de hidrocarburo robado en distintos predios asegurados.
En el transcurso de los operativos, se confiscaron vehículos, cisternas, maquinaria industrial y más de 3 millones de litros de sustancias utilizadas en la industria petrolera. Uno de los hallazgos más significativos se registró en Cunduacán, Tabasco, donde se recuperaron más de 100 mil litros de combustible robado y se desmanteló un deshuesadero de vehículos sustraídos ilegalmente.
Las operaciones se extendieron hasta el lunes 2 de junio, día en el que se identificaron 28 tomas adicionales y se realizaron cinco detenciones, siendo la única jornada con personas arrestadas. El aseguramiento de predios con 10 vehículos, cisternas y más de 60 mil litros de combustible sustraído refuerza los esfuerzos por desmantelar las redes delictivas dedicadas al huachicoleo.
Pemex ha reiterado que las pérdidas por robo de hidrocarburos han superado los 7 mil millones de dólares, y que los operativos seguirán activos hasta lograr una erradicación efectiva del delito.