Una corte estadounidense rechazó una apelación del narcotraficante Joaquín “Chapo” Guzmán Loera para revisar un fallo de 2019 que lo condenó a cadena perpetua.
Guzmán Loera, quien durante años lideró el cártel de Sinaloa, había presentado peticiones de ‘habeas corpus’ -demandas civiles utilizadas para evaluar si un encarcelamiento es legal- y pidió representación legal en esta apelación.
“Éste fue quizás el proceso penal más notorio de la década, y los cargos por los cuales el peticionario fue condenado bien podrían haber resultado en la pena de muerte si no hubiera sido por los términos de su extradición”, dijo el juez Brian Cogan, del Distrito Este de Nueva York, en el dictamen que desestimó la petición.
El fallo rechaza los argumentos de que la defensa de Guzmán no exploró suficientemente un acuerdo de culpabilidad y cita evidencia confidencial que sugiere que el “Chapo” todavía controla hasta miles de millones de dólares en activos, incluso aunque no están a su nombre.
Cogan, quien también presidió el juicio y la condena de Guzmán Loera en 2019, rechazó la solicitud de asesoría legal, diciendo que el condenado ya contaba con la ayuda de Mariel Colón Miró, una abogada que en los últimos años ha representado al capo narcotraficante y a su esposa.
El juez también cuestionó de dónde había obtenido Guzmán los fondos para pagar a sus abogados y por qué su esposa, liberada de prisión en septiembre, no ha tenido acceso a sus bienes.